MAGISTERIO PONTIFICIO (ENCÍCLICAS)

En 1765, el Papa Clemente XIII instituyó la fiesta del Sagrado Corazón de Jesús, aunque en un principio sólo para Polonia. Casi cien años después, en 1856, con el Beato Pío IX como Papa, fué que la fiesta del Sagrado Corazón alcanzó dimensión universal. Desde entonces, se han escrito cuatro encíclicas para hablar en concreto sobre el Sagrado Corazón de Jesús.

“Annum Sacrum” (versión en español). Escrita por el Papa León XIII, publicada el 25 de mayo de 1899. En donde explicó la importancia del la consagración de la humanidad al Sagrado Corazón. Llevándola a cabo y consagrando así al género humano al Sagrado Corazón de Jesús. Cabe destacar que un motivo personal que tuvo León XIII para llevar a cabo esta consagración fué su gratitud ante la curación de una enfermedad peligrosa. [Leer más]

El Papa Benedicto XV canonizó a Santa Margarita María Alacoque en 1920.

El Papa Pío XI, también llamado el Papa del Sagrado Corazón, escribió tres encíclicas:

1. "Quas Primas". Escrita el 11 de diciembre de 1925, donde establece la fiesta de Cristo Rey y pide se renueve anualmente la consagración del mundo en esta fecha. [Leer más]

2. “Miserentissimus Redemptor”. Escrita el 8 de mayo de 1928, el tema se centraba en la “expiación que todos deben al Sagrado Corazón de Jesús”, alabando la devoción al Sagrado Corazón definiéndola como "compendio de toda la religión y aún la norma de vida más perfecta". [Leer más]

3. "Caritate Christi Compulsi". Escrita el 30 de mayo de 1932, donde propone la reparación del Sagrado Corazón como remedio para las necesidades del mundo. [Leer más]

Encíclica de El Papa Pío XII, escribió el 20 de octubre del 1939, año en que fué elegido Papa, la encíclica “Summi Pontificatus”. Festejó los cuarenta años de la encíclica del Papa León XIII, "Annum Sacrum", por la que este último consagraba el mundo al Sagrado Corazón de Jesús: “No hay necesidad más urgente, venerables hermanos, que la de dar a conocer las inconmensurables riquezas de Cristo (Ef 3,8) a los hombres de nuestra época“. Tenía como ideal de su pontificado el culto al Divino Corazón, "alfa y omega de las enseñanzas pontificias". [Leer más]

El Papa Pío XII, escribe el 15 de mayo de 1956, la encíclica “Haurietis Aquas”, cien años después de que la devoción al Sagrado Corazón de Jesús se hiciera universal. Repitió tema de encíclica profundizando en la teología de esta devoción, al hablar de nuevo sobre el Sagrado Corazón, en concreto sobre su culto. [Leer más]

El Papa Pablo VI, escribe la carta apostólica "Investigabiles Dividías Christi", el 6 de febrero de 1965, la escribió pocos meses antes de clausurar el Concilio Vaticano II. En este año se cumplió el segundo centenario desde que se instituyera la fiesta litúrgica del Sagrado Corazón de Jesús. [Leer más]

San Juan Pablo II también habló del Sagrado Corazón desde su primera Encíclica “Redemptor Hominis”, escrita el 4 de marzo de 1979. [Leer más]

En 1979, durante su Pontificado, publicó el Catecismo de la Iglesia Católica. En su punto 478 se dice: “…Nos ha amado a todos con un corazón humano, por esa razón, el Sagrado Corazón de Jesús, traspasado por nuestros pecados y para nuestra salvación, es considerado como el principal indicador y símbolo del amor con que el Divino Redentor ama al eterno Padre y a todos los hombres.” [Leer más]

San Juan Pablo II, no dejó de hablar del Sagrado Corazón en todo su pontificado. Numerosas citas podemos encontrar en sus documentos y discursos. Entre ellos en su encíclica "Dives in Misericordia" escrita el 30 de noviembre de 1980 y dice: "El acercarnos a Cristo en el misterio de su Corazón, nos permite detenernos en este punto de la revelación del amor misericordioso del Padre". [Leer más]

El 11 de junio de 1999, para la solemnidad del Sagrado Corazón de Jesús, San Juan Pablo II, dá un mensaje con motivo del centenario de la Consagración del Género Humano al Sagrado Corazón, realizada por el Papa León XIII: "El hombre del año 2000 tiene necesidad del Corazón de Cristo para conocer a Dios, y para conocerse a sí mismo. Tiene necesidad de Él para construir la civilización del amor". [Leer más]

El Papa Benedicto XVI, continúa con la línea de sus predecesores, avalando e impulsando con sus palabras la devoción al Sagrado Corazón, la cual: "Permanece como imprescindible para una relación viva con Dios" (15 de mayo de 2006). Además afirma: "La verdadera religión consiste en entrar en sintonía con este Corazón, rico en misericordia", (16 de septiembre de 2007). En la Jornada Mundial de la Juventud en agosto de 2011, consagró a todos los jóvenes del mundo al Sagrado Corazón de Jesús.

El Papa Francisco, durante el Ángelus el 9 de junio de 2013, dijo: "El Corazón de Jesús es el símbolo por excelencia de la misericordia de Dios; pero no es un símbolo imaginario, es un símbolo real, que representa el centro, la fuente de la que ha brotado la salvación para la entera humanidad".

Varios santos de la Iglesia han promovido la adoración al Sagrado Corazón de Jesús, entre ellos: Santa Margarita María Alacoque, Santa Catalina de Siena, Santa Teresa de Ávila, San Francisco de Sales, Santa Juana de Chantal y Santa Faustina Kowalska, entre otros.